Las velas logran ambientes cálidos y reconfortantes tanto si las colocas en un rinconcito como si las haces protagonistas del espacio como centro de mesa.
Cuando pensamos en decoración con velas lo primero que nos viene a la cabeza seguramente es el baño, pero lo cierto es que la velas pueden decorar tanto de día como de noche cualquier espacio interior o exterior. Estas son algunas ideas para que las aproveches al máximo.
Un clásico
¿Tienes un candelabro y los dejado olvidado? Acompañado de velas altas luce espectacular en la mesa del comedor, una consola o una bufetera. Le dará ese toquecito de elegancia al espacio. Un acierto es que combines las velas con el color de la mantelería.
Te recomendamos evitar las velas aromáticas en la mesa del comedor, porque su fragancia podría alterar tu percepción de los sabores.
Aromatiza tus ambientes
Una opción muy acertada es reunir los aromatizadores y una vela con fragancia idealmente igual o similar, para que su aroma se potencie.
Evita este consejo si el espacio es reducido y con poca ventilación, porque el efecto ya no sería agradable.
Crea vacíos
Por ejemplo, aunque un candelabro tenga brazos para una decena de velas, no por ello tienes que llenarlos todos. Además, también es muy atractivo visualmente que las velas sean de distintos colores, siempre guardando una paleta: monocromática, complementaria o contrastante.
Diferentes alturas o formas
Una técnica parecida a la anterior, al usar diferentes alturas o formas dinamizas las composiciones. Puedes escoger candeleros que tengan varias alturas, algo que dará una mayor sensación de volumen. Y la combinación de formas hará que sea una composición llena de ritmo. En este caso, también puedes unir la composición por medio del color.
¿Velas colgantes?
¡Sí y sí! Son un acierto total, al igual que están muy de moda las plantas colgantes para decorar de una forma muy natural, las velas también quedan perfectas. Puedes emplear estructuras diseñadas para este objetivo teniendo la precaución de que el lugar en el que las coloques no esté expuesta a corrientes de aire, para no verter accidentalmente cera o botar la vela.
Tips para que duren más
- La primera vez que utilices una vela, déjala encendida varias horas. Espera a que la capa superior de la cera esté completamente líquida, de este modo evitarás que se formen agujeros alrededor de la mecha.
- Utiliza tus velas dentro de los 2 meses siguientes a la compra para que no pierda las propiedades, sobre todo olor.
- Se recomienda congelar las velas un par de horas antes del primer uso, de esta forma la cera se quema de manera más lenta.
- Enciende la vela en periodos largos. Si no puedes encenderla un mínimo de 30 minutos es mejor que no prendas la mecha, hacerlo en periodos de 10 minutos ocasiona que se creen surcos y se consuma de manera irregular.
- Corta la mecha regularmente. No es necesario que lo hagas con cada uso pero si de manera frecuente para evitar que ahúme o se recaliente el cristal. La longitud ideal de la mecha es entre 3 y 5 mm.
- Una vez apagada asegúrate de dejar la mecha recta y centrada. Si este proceso lo haces en caliente evitarás que se parta. Así la vela se consumirá de manera regular.
