Arroz basmati

El arroz basmati es uno de los arroces más aromáticos que hay. Es de grano muy largo con un olor y sabor característico. Cuando se cocina aumenta casi el doble del tamaño que cuando está crudo, y se puede encontrar en tres variedades: blanco, integral y gigante, con granos de mayor tamaño.

Es originario de Pakistán y la India, en donde se cultiva desde hace cientos de años, los de las zonas montañosas del Himalaya son famosos por su gran calidad.

Su aroma delicado y agradable es el que le ha dado su nombre, que en hindi significa “reina de las fragancias” o “fragante”. Una vez lavado para eliminar el almidón y cocido unos 20 minutos, el resultado es un arroz cuyos granos se mantienen juntos pero no se pegan. Un truco para que no se rompa durante la cocción, ya que al ser tan largo es especialmente delicado, es dejarlo un rato en remojo antes de la cocción.

Es ideal para: acompañar un curry, un paneer peshawari —queso fresco de vaca estofado—, un palak paneer, que es parecido al anterior pero con espinacas, o cualquier guiso que lleve salsas típicas de la cocina india o pakistaní.

Este maravilloso ingrediente también tiene propiedades y beneficios para tu salud:

• Está presente casi en su totalidad el complejo B.
• Contiene vitamina E, la cual actúa como un antioxidante.
• Presenta vitamina K, recomendada para regular la coagulación de la sangre.
• Contiene minerales como el manganeso para activar el metabolismo de proteínas e hidratos de carbono.
• También posee hierro y selenio; y  en menor cantidad calcio, potasio y cobre.
• Contiene los 8 aminoácidos importantes para el organismo.
• No contiene grasa, sodio ni gluten.
• Es ideal para la dieta de personas diabéticas, ya que su índice glucémico es inferior a la de otros arroces, por lo que regula los niveles de azúcar en la sangre.