La Navidad, las tardes frías de diciembre, las visitas a la familia, las conversaciones, las risas y el ambiente festivo de estas fechas ¡todo gira alrededor de una taza de ponche! Es sin duda, uno de los aromas y sabores que no pueden faltar en nuestra casa.
Ácido, dulce, calentito o frío, al igual que el fiambre, cada familia le da un toque diferente y ahí está el encanto. El ponche incorpora variaciones cuyo origen no es otro más que el gusto o una preferencia heredada de generación en generación.
En Guatemala se preparan dos tipos de ponche: el de frutas y el de leche. Cada uno tiene su estilo y sus seguidores. ¿Cuál es tu favorito?
Ponche de frutas
Este es el tradicional y hay dos versiones muy populares: el que lleva piña y el que está hecho a base de naranja. Puedes prepararlo con frutas frescas, congeladas o deshidratadas.
Lo que lo hace especial es la combinación de sabores especiados y frutales, su consistencia líquida y los trozos de fruta. Es ideal servirlo caliente, pero hay quienes lo toman frío durante el día.
Como te das cuenta, es una receta muy flexible que independiente de cuál de las dos versiones prepares, puedes darle tu toque personal, quitando o agregando ingredientes y la tradición de tu familia.
– Los ingredientes perfectos: plátano, piña (y su cáscara para hacer una infusión), pera, manzana, rosa de Jamaica, té negro, canela, pimienta gorda, clavo, azúcar y una pizca de sal. Todo se hierve y luego se cuela para que quede solamente el líquido, finalmente agregas los trozos de fruta.
– Para la receta hecha a base de naranja, debes obviar la piña y agregarle otros ingredientes: jugo de naranja, raíz de jengibre y frutas frescas picadas: manzana, pera, plátano o la bolsa de fruta deshidratada que venden en el súper (siempre obviando la piña).
Ponche de leche
Es el conocido ‘Eggnog’, de consistencia cremosa. Este ponche es perfecto para darle un giro a la tradición, delicioso para el invierno y lo mejor, es que se prepara rapidísimo.
La base, como su nombre lo indica, es la leche, acompañada de especias y un toque de ron. Aunque si gustas puedes prepararlo sin licor y sustituir por un poco de vainilla.
– Los ingredientes perfectos: leche, canela molida y en raja, pimienta gorda, huevos, miel y ron (brandy).
8 tips para el mejor ponche
El ponche como muchos de los platillos de esta época, debe llevar el toque de cada familia, pero sin importar qué tipo de ponche hagas o lo que le pongas, estos secretos harán de tu ponche ¡el mejor!
1. Corta las frutas en trozos no muy pequeños
Esto con el objetivo de que no se deshagan.
2. Equilibra el toque de acidez
Lo acidulado del ponche es lo que lo hace rico, pero si exageras podría ser desagradable. Encuentra el equilibrio no exagerando con la piña.
3. La pizca de sal
No olvides ponerle una pizca de sal, esto resalta los sabores de las frutas.
4. Carameliza el azúcar
Cuando el azúcar esté dorada, agrega un poco de agua para dejarla hervir hasta que se diluya y agrégala al ponche. Le dará un tono caramelo al ponche y un sabor diferente.
5. Más cuerpo
Si deseas un ponche con más cuerpo, licúa un poco de los plátanos ya cocidos y agrégalos.
6. Sustituye el azúcar
Para bajar el contenido calórico, puedes sustituir el azúcar con un endulzante artificial o agregar frutas más maduras, en especial plátanos.
7. Atrévete a innovar
Agrégale frutas inesperadas para darle un twist… El coco es una gran opción.
8. Frutas más crocantes
Si quieres un líquido más espeso pero las frutas bien crocantes, hierve primero el agua con el azúcar y luego agrega las frutas, para no cocinarlas de más. Evita las frutas muy maduras.
¡Listo! A disfrutar tu ponche.
Tip: ¡Que no se te olvide el piquete!
