El desequilibrio hormonal puede provocar una serie de problemas, incluidos ciclos menstruales irregulares, aumento de peso, ansiedad, caída del cabello, problemas de acné, de salud ósea y de fertilidad.
Curiosamente, estos problemas a menudo tienen sus raíces en las elecciones de estilo de vida cotidianos y, sorprendentemente, estas causas pueden ser tan simples como saltarse el desayuno y no dormir lo suficiente.
Para quienes buscan recuperar el equilibrio hormonal y abordar los problemas de salud asociados, es fundamental conocer estos desencadenantes comunes.
1. Saltarse el desayuno
Si tu desayuno es solo una taza de café, piénsalo dos veces. Saltarse el desayuno puede alterar el equilibrio hormonal. Es esencial comenzar el día con un desayuno nutritivo para estabilizar tus hormonas.
2. Ejercicio en exceso
Realizar ejercicios intensos en exceso, como correr o el entrenamiento en intervalos de alta intensidad (HIIT), pueden alterar inadvertidamente su equilibrio hormonal.
El ejercicio puede estimular las hormonas que te hacen sentir bien, pero por ejemplo, demasiado tiempo en la caminadora, puede elevar el cortisol (la hormona del estrés) en tu cuerpo a niveles más altos de lo normal, afectando tu ciclo menstrual y tu fertilidad. Equilibra y haz un tiempo moderado de ejercicio de esta modalidad y agrega yoga o pilates a tu rutina.
3. Malos hábitos de sueño
No dormir las 6 a 7 horas recomendadas cada noche puede afectar negativamente tus hormonas. Priorizar un sueño de calidad es fundamental para la armonía hormonal.
Te recomendamos seguir estos consejos.
4. Tiempo excesivo frente a la pantalla
Desplazarse por el teléfono antes de dormir e inmediatamente al despertarse puede afectar negativamente la calidad del sueño e interrumpir el ciclo hormonal. Minimizar el tiempo frente a la pantalla durante estos períodos cruciales puede ayudar a equilibrar tu hormonas.
5. Productos químicos que alteran el sistema endocrino
Los artículos cotidianos, como las botellas de agua de plástico y los cosméticos en latas de aluminio, pueden contener sustancias químicas que alteran el sistema endocrino. Estas sustancias pueden interferir con tu sistema hormonal, por lo que es recomendable limitar tu exposición a ellas.
6. No pasar tiempo con tus amigas
Las conexiones femeninas elevan la oxitocina que reduce el estrés y los problemas cardiovasculares. Pasar tiempo con tus amigas hará que te sientas calmada y en paz.
7. Tener una dieta baja en grasas saludables
Limitar el consumo de grasas buenas aumenta la inflamación y convierte tu testosterona en estrógeno bloqueando tus receptores de progesterona. Esto hace que ganes peso, que tengas ciclos menstruales más intensos y con PMS, que tengas probabilidad de desarrollar quistes en el pecho y aumenta tu riesgo a padecer tumores fibroides.
8. Uso excesivo del gel de manos
Usar este producto tan común en exceso puede alterar el balance entre las bacterias buenas y malas del cuerpo. Lo que podría resultar en más inflamación y estar apagando tus hormonas. Además contiene triclosán, un químico que aumenta los niveles de estrógeno en las mujeres y suprime la función de la tiroides.
9. Una mentalidad negativa
La insatisfacción, la culpabilidad y el resentimiento, pueden provocar fallos hormonales. Haciendo 30 minutos de meditación o de yoga, reducirás el cortisol y te sentirás genial.
Lograr el equilibrio hormonal requiere dedicación y perseverancia. Para prevenir los problemas de salud mental y física causados por el desequilibrio hormonal, tu estilo de vida debe priorizar la ingesta de nutrientes, la actividad física, la calidad de sueño y el control del estrés. Crear hábitos que promuevan la producción hormonal necesaria y eviten los factores que contribuyen a las fluctuaciones poco saludables de estas, asegurará que tu cuerpo pueda llevar a cabo las funciones biológicas esenciales que lo mantienen saludable y feliz.
