Texto: MARINA GRANADA
La gripe, gripa o influenza es una enfermedad infecciosa y contagiosa, causada por un virus que ataca las vías respiratorias y se vuelve más propensa en climas fríos o estaciones de mucha lluvia.
Tos, congestión nasal, dolor de cabeza y garganta, fiebre, escalofríos, dolores musculares y debilidad en todo el cuerpo, son algunos de los síntomas que sufren quienes padecen esta enfermedad que ataca a quienes padecen de insuficiencia de vitaminas C y D.
La principal recomendación para que no nos dé gripe o por lo menos nos dé con menos frecuencia, es consumir alimentos ricos en vitaminas C y D, como fresa, cereza, naranja, papaya, kiwi, guayaba, melón, brócoli, coliflor, tomate, ajo, salmón, leche de vaca y de soya, yogurt, coles, pimientos y cereales.
La higiene es protagonista en este tema, si conviertes las siguientes recomendaciones en tus hábitos diarios, seguramente lograrás disminuir las posibilidades de gripe:
– Evita mantener contacto con personas con gripe.
– Evita cambios bruscos de temperatura.
– Lávate las manos con frecuencia.
– Cambia por lo menos cada ocho días las sábanas de tu cama y las cobijas lávalas una vez al mes, esto evitará que el virus encube mientras duermes.
Ahora bien, si en este momento padeces de gripe, te vamos a regalar unos truquitos caseros muy buenos que te sacarán de ese malestar en un par de días y te sentirás como nueva.
CEBOLLA MORADA Y MIEL
Éste remedio lo estoy tomando desde que tengo uso de razón, mi mamá me lo hacía cuando era pequeña y ahora lo hago con mi hijo, es ¡fabuloso!
En la noche pon en un tazón una cebolla morada cortada en cuadros medianos, la bañas en miel y la dejas tapada toda la noche. Al otro día encontrarás que la miel se ha mezclado con el agua que destiló la cebolla, pásala por un colador y tómatela toda a cucharadas en ayunas y deja pasar por lo menos 15 minutos antes de ingerir alimento. Hazlo durante tres o cuatro días seguidos, el efecto antibiótico de la cebolla ayudará hasta con la infección de garganta.
TÉ DE JENGIBRE Y PANELA
Hierve a fuego medio por 30 segundos un poco de agua con algunos trocitos de jengibre y panela dentro, retira de la hornilla y deja tapado por 5 minutos más para que mejore la infusión, tómatelo caliente, métete a la cama y te tapas con muchas cobijas, la idea es sudar un poco para sacar el malestar. Puedes hacerlo dos veces al día. El jengibre también tiene propiedades antibióticas. No olvides cambiar las sábanas y lavar las cobijas una vez te recuperes.
TÉ DE MIEL Y LIMÓN
Éste es uno de los remedios más populares; la mejor manera de tomarlo es poniendo en una olla pequeña dos pocillos de zumo de limón con seis cucharadas de miel, hierve por unos tres minutos y ya. Tómatelo a cucharadas en el transcurso del día.
SOPA DE POLLO
Deliciosa y reconfortante. Aporta hierro, zinc y tiene propiedades anti – inflamatorias y antisépticas, hará que te sientas mucho mejor.
OTROS REMEDIOS…
Inhalar vapor de eucalipto por 10 minutos, el zumo de naranja, el té de limón, el té de sauco y el té de propóleo, también aseguran una buena y pronta recuperación.
Debes tener en cuenta que en caso de que tengas dificultades para respirar o lleves más de tres días con fiebres difíciles de bajar de 38ºC, es mejor que corras a ver a tu doctor.
