Precalienta el horno a 375°F.
En una olla, derrite la mantequilla y sofríe la cebolla. Cuando esta esté translúcida, agrega la harina. Cocina durante unos minutos formando un roux y añade la leche mezclada con la crema. Cocina a temperatura baja hasta que espese; sazona con nuez moscada, sal y pimienta al gusto.
En el fondo de un pyrex de 8”, coloca ½ taza de queso ricotta mezclado con ½ taza de queso parmesano sazonado con sal y pimienta. Agrega unas gotas de aceite de oliva. Encima coloca 3 láminas de pasta, ⅔ tazas de la espinaca y 1 ⅓ tazas de salsa. Repite hasta terminar, colocando sobre la última capa la otra ½ taza de queso ricotta mezclada con la ½ taza de queso parmesano restante. Hornea de 35 a 40 minutos, o hasta que el queso esté derretido y doradito.