Lava el pollo con abundante agua y unas gotas de jugo de limón desaguándolo muy bien, seca con toallas de papel absorbente y reserva.
Licúa el aceite de oliva con el perejil y el ajo, y sazona con sal y pimienta. Vierte esta mezcla sobre el pollo y marínalo dentro de la refrigeradora como mínimo 2 horas. Puedes prepararlo también la noche anterior.
Precalienta una plancha a temperatura mediana-alta. Asa las pechugas hasta estar ligeramente doradas. Deja enfriar y corta en tiras de media pulgada de ancho.
Coloca la espinaca dentro de una linda ensaladera. Agrega las fresas y las pecanas, mezcla cuidadosamente. Luego añade el queso de panela. Coloca el pollo encima. Puedes agregar el aderezo o servirlo aparte.