En una olla sofreír el la cebolla con el aceite de oliva hasta que esté translúcida. Agregar el ajo y sofreír por 2 minutos más.
Agrega los tomates, pasta de tomate, melaza y vinagre. Hierve a fuego lento. Con una cuchara aplasta los tomates. Agrega el resto de ingredientes y continúa hirviendo destapado de 45 a 50 minutos, revolviendo constantemente para evitar que se pegue y hasta que espese.
Licúa con una licuadora de inmersión hasta que esté de consistencia suave. Si no tienes una, transfiere cuidadosamente la mezcla a una licuadora o procesador de alimentos y licúa. Si deseas, puedes colarla. Enfría en la refrigeradora, la kétchup continuará espesándose.
Notas
1. Manténla refrigerada en un recipiente hermético. 2. El dulce y especias pueden ajustarse a tu gusto. 3. Puedes agregarle vinagre balsámico, Sriracha, ajo rostizado o chile pimiento rostizado ¡Queda deliciosa!