Precalienta el horno a 375°F.
Unta el fondo de un pirex de 13x9 pulgadas con 2 cucharadas de aceite de oliva y coloca encima láminas de pasta.
Agrega 1 taza de salsa y ⅓ de los quesos. Repite el procedimiento, terminando con la tercera capa de pasta. Encima solo vierte salsa, el resto del queso parmesano y el orégano picado.
Hornea por 25 minutos, o hasta que la pasta este cocida y el queso parmesano ligeramente dorado.