Fotografía: Studio McGee
La cama es el lugar en donde nos cargamos de energía, es por eso que una mala elección podría darnos como resultado problemas de espalda y tensión. Así que, aunque comprar una buena cama, supone normalmente una inversión alta, a la larga notarás la calidad y lo bueno que es para tu salud.
Como tu nueva cama tendrá que durar muchos años, elígela bien tomando en cuenta estos consejos:
Visita varias tiendas
Es importante que conozcas y compares las diferentes opciones. No compres una cama en línea, ve a las tiendas y busca el estilo, la forma y el tamaño que se adapte mejor a tu habitación y a tus necesidades.
No solo la mires ¡pruébala!
Es esencial que la pruebes antes de comprarla, así que deja la vergüenza y recuéstate un rato. Es indispensable saber si se ajusta a tus necesidades, a tu cuerpo y a tus gustos.
El colchón
Una mala elección del colchón puede desencadenar problemas de espalda y tensión. Lo primero que debes analizar es que sea la mejor opción para tu columna vertebral.
Generalmente encontrarás tres tipos de colchón: blando, duro o muy duro. Toma en cuenta que si es muy blando, será igual de dañino para tu espalda que uno muy duro. El blando no sostiene lo suficiente y provoca constantes movimientos durante el sueño, y el duro podría causar rigidez en el cuerpo.
Los especialistas recomiendan que el colchón debe tener un grosor mínimo de 15 centímetros.
Piensa en el tamaño de tu habitación
Este es un dato sencillo que debes tomar en cuenta seriamente, ya que para relajarte debes tener un espacio razonable alrededor de tu cama.
Considera que será muy incómodo y estresante tener una cama tan grande que no tengas espacio para nada más. Lo ideal es que haya suficiente espacio a cada lado para poder circular libremente y colocar una mesita de noche o una alfombra.
No escojas la más barata
La mejor cama no siempre es la más cara, pero seguramente no es la más barata. Asegúrate que estás adquiriendo una de buena calidad que te de el soporte necesario para tener un descanso reparador. Una buena idea es buscar las revisiones del producto en línea, de esta manera puedes ver lo que la gente piensa sobre ciertas marcas.
Las medidas
Para que tu cama sea la adecuada, debe medir unos 20cm más de tu estatura. Aparte de esto, existen medidas estándar. Las camas imperiales o individuales tienen 90-100 cm de ancho. Las semi matrimoniales o swin, que son camas individuales, pero un poco más anchas, tienen 110cm de ancho por 200cm de largo. Las Queen 150 por 200cm, y la cama King es de 200 por 200cm.
No te olvides de las almohadas
Las almohadas son tan importantes como el colchón, ya que son vitales para que descanses correctamente. Es por eso que es muy importante dedicarle tiempo a la búsqueda de la correcta, esa que se adapte a nuestro cuello y nuestra postura al dormir.
La ideal permitirá que la columna entera se apoye completamente y las vértebras se mantengan acomodadas. Te recomendamos las almohadas cervicales, porque buscan la forma anatómica exacta.
