Aplicar un estilo monocromático es usar un color en varios valores, es decir colores claros u oscuros a los que se les agrega blanco, negro o gris para lograr distintas tonalidades del mismo y aplicarlas a un ambiente.
Es importante que no confundas, monocromático con una paleta de color neutral. Cuando hablamos de una paleta de colores monocromáticos, hablamos de un solo color como rojo, turquesa, azul, etc. en diferentes valores.
Cuando hablamos de colores neutrales, hablamos de colores como blanco, gris, y beige, en tonalidades frías y cálidas. Puede existir una paleta de color monocromática en colores neutrales o de colores vivos, siempre usando un solo color y aplicando la teoría antes descrita.
Tres tipos de esquemas de color
Lo primero, hagamos un repaso a las opciones más habituales:
- Esquema de color de múltiples gamas pero con cambios sutiles, muy suaves.
- Esquemas de color en contraste, por ejemplo mediante contrarios: rojos con verdes, blancos y negros o gamas cálidas con otras frías.
- Esquema de color monocromático, en el que se usa un solo color en sus diferentes tonalidades, en el caso del verde puede ser desde el pastel hasta un intenso botella, en los rojos, ir del rosa pálido al bermellón más encendido, en los azules, del cielo al intenso eléctrico.
Ventajas
Sin duda el confort visual es innegable, pues se produce una placentera sensación de tranquilidad y orden. Al contrario, el exceso de color o apostar por colores contrapuestos tienen su interés, pero es una fórmula que agota rápidamente y satura de información el cerebro. Otra virtud es la facilidad de coordinar, aunque hay que prestar atención para no caer en un espacio aburrido.
Para crear un ambiente armonioso y más atractivo, es indispensable incorporar a una paleta monocromática un poco de textura y patrones. Puedes lograrlo integrando cojines con textura de piel o patrones geométricos, alfombras y accesorios, teniendo el cuidado de siempre guardar el equilibrio para un ambiente bien logrado.
¿En dónde aplicarlo?
Será todo un acierto en espacios de pocos metros, pues crea espacios visualmente más grandes con sensación de unificación. Cuando una vivienda tiene varias habitaciones en diferentes colores, el cerebro percibe cada una de ellas como individuales y no como un todo. Para que una vivienda tenga sensación de hogar debe reflejar un espacio único dividido en varias estancias, no como estancias independientes desvinculadas del resto de la vivienda. Con un interiorismo monocromático conseguirás que sea un todo.
Tip experto
Puedes agregar un color neutral a tu esquema monocromático, uno que ya se encuentre en tu decoración, los patrones de las telas o en los adornos. Agrega solo un toque de este, dejando que predomine siempre el color base que escogiste para tu paleta de color.
Con estos sencillos consejos lograrás un ambiente tranquilo, relajante, con mucha armonía, y sobre todo innovador y a la moda.
