Una guía para los aderezos

Sin duda, lo que hace que una ensalada pase de ser buena a una espectacular, son los aderezos. Dan sabor, textura y cuando preparas más de uno, harán que una misma ensalada tenga dos versiones instantaneamente.

Hay cientos de miles de recetas para aderezos, pero casi todos se pueden resumir en tres elementos esenciales: sal, grasa y ácido. Lo más importante es lograr un equilibrio adecuado entre estos.

Mezclado en las proporciones correctas, este trío es la base para casi todos los tipos de aderezos. Solo debes saber que hay una gran diferencia de sabor y consistencia entre, por ejemplo, una vinagreta de limón y un aderezo de queso azul.

Hemos elaborado esta guía para comprender el aderezo con un poco más de detalle para que te conviertas en todo un experto en la materia. Toma nota.

La fórmula

Por lo general, un aderezo se basa en una combinación de ácido y grasa. El ácido es cualquier cosa líquida y ácida, o por debajo de 7,0 en la escala de pH. El vinagre o el jugo de cítricos son los ácidos más comunes, pero el jugo de tomate o la salsa de soya también funcionan. La grasa suele ser aceite, pero no tiene por qué serlo: las grasas cremosas lácteas y no lácteas, como el aguacate, también funcionan muy bien en la fórmula del aderezo. La sal se puede ajustar al gusto.

Tipos de aderezos

Cuando se trata de aderezos para ensaladas, los principales son tres:

Vinagreta: que son aderezos ligeros basados en un delicado equilibrio entre ácido y aceite.
Magros bajos en grasa: parte de las vinagretas, típicamente hechos con especias picantes y un poco de ácido y solo un toque de aceite.
Cremosos: que son aderezos más ricos hechos con queso, yogurt o mayonesa.

Vinagretas

1 parte de ácido + 3 – 4 partes de aceite

Las vinagretas, o aderezos a base de vinagre, casi siempre se preparan en una proporción de 1 parte de ácido por 3 o 4 partes de aceite para un sabor menos astringente.

Ácido: tradicionalmente se elaboran con vinagre, a menudo derivado del vino. Pero cualquier tipo de ingrediente ácido puede funcionar, incluido el jugo de cítricos, el puré de tomate o la salsa de soya.
Aceite: este puede ser neutro, como el de semilla de uva. Puedes utilizar cualquier aceite o grasa que sean líquidos a temperatura ambiente.
Otros ingredientes: muchas vinagretas incorporan emulsionantes —ingredientes que ayudan a que el ácido de base de agua se mezcle con el aceite—, edulcorantes y condimentos.

Cremosos

1 parte de ácido + 8 a 16 partes de grasa

El aderezo ranch, el de queso azul y cualquier aderezo con mucha grasa entran en esta categoría. Los aderezos cremosos comienzan con ácido, pero en lugar de aceite, normalmente usan una grasa más densa.

Ácido: puedes usar cualquier tipo de ingrediente ácido, incluido el vinagre o el jugo de cítricos.
Grasa: la mayonesa, el suero de leche, la crema agria, el yogurt y el puré de aguacate pueden formar la base de un aderezo cremoso. La proporción de ácido a grasa es mucho más baja, por lo que da como resultado un aderezo más espeso que se puede usar para untar en sándwiches o usar como salsas.

Otros ingredientes: todos los aderezos cremosos incorporan otros saborizantes y condimentos, especialmente hierbas, especias y edulcorantes.

Toma en cuenta:

El tipo de aderezo que elijas depende totalmente del tipo de ensalada que estés preparando, por ejemplo:

Vinagretas: para ensaladas de verduras frescas.
Aderezos magros: para ensaladas de cítricos.
Aderezos cremosos: ensaladas con huevos o papas.

Tips

Estos son nuestros mejores consejos para hacer el mejor aderezo.

Como todo en la cocina, pero especialmente en el caso de preparaciones crudas, utiliza ingredientes de la mejor calidad. Nuestros aceites favoritos: oliva extra virgen, de sésamo tostado, de coco y aceite de mostaza prensado en frío.
La mostaza, el azúcar y la miel son excelentes emulsionantes en un aderezo. Por supuesto, también agregan un sabor maravilloso.
Un toque de dulzura funciona muy bien para los aderezos. Ese toquecito dulce puede provenir de diferentes ingredientes, la miel o jarabe de arce funcionan excelentemente bien o incluso un toque de tu mermelada favorita puede hacer maravillas en tus aderezos.
Sabor, ese es nuestro mantra para todo en la cocina, pero especialmente para los aderezos. Deja que tu papilas gustativas sean tu guía, pero ten en cuenta que el aderezo es un condimento y debe tener un sabor bastante fuerte por sí solo.
Un tip para probar la sazón de tus aderezos: remoja un trozo de lechuga en el aderezo y pruébalo. Es una buena manera de guiarte para ir ajustando el sabor.
No tengas miedo de experimentar con el sabor y las adiciones a tu aderezos. Especialmente con una vinagreta, hay mucho que se puede hacer.
Agrega especias y hierbas enteras o ligeramente molidas a tus aderezos y evita las especias en polvo.
¿Tienes una salsa de hierbas favorita? ¡Agrégala a la vinagreta! Un toque de chutney también funciona muy bien.
Los aderezos cremosos para ensaladas tienden a espesarse cuando se almacenan, puedes diluirlos con un poco de leche, agua o fondo.
Cuando se trata de aderezos, menos es más. Como dicen, un aderezo debe vestir la ensalada, no ahogarla. En el caso de aderezos cremosos, cubre los ingredientes ligeramente y, en el caso de aderezos magros y vinagretas, una llovizna ligera en la parte superior es suficiente. Siempre puedes servir aderezo extra para aquellos que quieren más.

Para almacenarlos

Una buena opción para almacenarlos es en mason jars, son geniales porque puedes hacer el aderezo directamente en el frasco y luego sellarlo y guardarlo en la refrigeradora. Pero funcionan muy bien cualquier recipiente hermético.

Por lo general, los aderezos duran de 4 a 7 días refrigerados. Las vinagretas duran más y los aderezos cremosos duran alrededor de 4 días.

Ya sea que desee hacer sus propios aderezos por conveniencia para fines de salud, estos aderezos son fáciles de hacer y son una excelente manera de agregar un sabor delicioso a sus ensaladas.