El día antes asa todos los ingredientes menos la raja de canela y la ramita de perejil. Licúa y cuela. Coloca la salsa en una olla, agrega el perejil y la canela y hierve muy bien, sazona con sal y pimienta. Esta salsa debe quedar espesa.
Prepara la masa, combinando dentro de un tazón gande la maseca con la manteca y el aceite. Mezcla el agua con la sal y el bijol y agrégala poco a poco. Añade más agua si fuera necesario. Debe de quedar una masa que se depegue sin dificultad de las manos.
Lava muy bien el pollo y sécalo con toallas de papel absorbente. Con cada bolita de masa prepara una tortilla no muy delgada, de aproximadamente 3 pulgadas de diámetro. Puedes usar una bolsa plástica y formarla con un plato plano o con una máquina de hacer tortillas. Coloca la tortilla dentro de una tusa y cuidadosamente vierte 2 cucharadas de salsa y un pedacito de pollo dentro de cada una. Cierra la tortilla, coloca la otra tusa y dobla la tusa para formar el chuchito. Amárralo con la tirita de tusa.
Coloca los chuchitos dentro de una olla, agrega 2 litros de agua. Tapa los chuchitos con un plástico y luego con la tapadera de la olla. Cocínalos por 2 horas. A la hora de servir, acompaña con salsa de tomate hecha en casa y queso seco, o de Zacapa.